I+D+i

Desarrollo de una metodología para el análisis y la cartografía de la tranquilidad a escala territorial

La tranquilidad es un concepto ancestral y cotidiano que puede definirse como un estado de ánimo de sosiego o armonía o, dicho de otro modo, exento de inquietud. Y también es un bien cada vez más escaso en el contexto de las sociedades modernas. Actualmente, como consecuencia de un ritmo de vida acelerado, una parte creciente de la población considera la tranquilidad -de forma consciente o no- como un componente básico, cuando no el más importante, en las decisiones relativas al consumo de los productos turísticos y de ocio. En otras palabras, consumimos tranquilidad y este concepto tan etéreo se encuentra en camino de convertirse en uno de los argumentos principales de las ofertas en los ámbitos turístico o residencial. Sin embargo, solo muy recientemente la tranquilidad empieza a considerarse como uno de los ingredientes esenciales del paisaje - y, por tanto, del bienestar de las personas (Nogué et al., 2008)-, lo que explica que no aparezca ninguna referencia a ese aspecto en el Convenio Europeo del Paisaje, firmado en Florencia en 2000.

A pesar del interés que suscita la tranquilidad, hasta hace muy poco no había sido abordada de forma analítica. La cuantificación de la tranquilidad no es una tarea sencilla porque, de hecho, la sensación de tranquilidad deriva de un estado psicológico que depende de numerosas variables, tanto externas (contaminación acústica, aglomeraciones de gente, intrusión visual de infraestructuras , ...) como internas (estado de ánimo, estereotipos preconcebidos, ...). Si bien las primeras son a menudo susceptibles de ser evaluadas, al menos de forma semicuantitativa, las últimas resultan difícilmente abordables. En todo caso, la tranquilidad es hoy en día un valor intangible pero preciado y esgrimido, consciente o inconscientemente, en los discursos que apelan a la naturalidad territorial como un elemento insustituible y amenazado sobre el que basar nuestra calidad de vida. Sin embargo, la dificultad de afrontar su análisis y de conocer su comportamiento espacial y territorial, no ha permitido a fecha de hoy poder integrarla en los procesos de planificación territorial y de los espacios naturales, ni en los procedimientos de evaluación de impacto.

La idea de medir la tranquilidad nació en el Reino Unido, un país donde los espacios urbanos, rurales y naturales se encuentran muy imbricados y donde se ha vuelto perentoria la tarea de conciliar el crecimiento socioeconómico con el derecho a disfrutar de espacios tranquilos. Ya en los inicios del decenio de 1990, la Comisión del Medio Rural (Countryside Commission) y el Consejo para la protección de la Inglaterra rural (Council for the Protection of Rural England, CPRE) promovieron la cartografía de las zonas tranquilas ante la evidente profusión de la urbanización y las infraestructuras. Esta idea evolucionó desde un primer concepto cualitativo basado en la diferenciación de zonas tranquilas y no tranquilas (Bell, 1999; Land Use Consultants, 2007), hasta un método bastante sofisticado de carácter cuantitativo continuo gracias a la irrupción de los sistemas de información geográfica (MacFarlane et al., 2005; Jackson et al., 2008). Si bien este último ofrece una imagen mucho más precisa sobre el nivel de tranquilidad de los distintos puntos del territorio el planteamiento es largo, complejo y, en consecuencia, oneroso.

MN Consultores en Ciencias de la Conservación inició en 2009 una línea de investigación con el objetivo de desarrollar una metodología ágil, objetiva, escalable y reproducible para el análisis territorial de la tranquilidad, sin renunciar a la flexibilidad necesaria para hacerla adaptable a los diferentes contextos territoriales que se dan hoy en nuestro entorno. Se basa en las siguientes premisas (ver esquema):

  • Debe combinar una aproximación bastante precisa a la tranquilidad con una inversión razonable en tiempo y recursos humanos y materiales.
  • Se considera que todos los entornos naturales -no perturbados por la acción antrópica-, son igualmente tranquilos, independientemente de su valor estético o simbólico (los entornos agrícolas, sin embargo, se valoran como tranquilos porque nuestra sociedad percibe los cultivos como característicos del medio natural / rural).
  • Los factores que degradan la tranquilidad están relacionados con la intrusión de actividades antrópicas. Dicho de otro modo, la disminución de la tranquilidad proviene de la presencia de alteraciones de la situación "natural" de un entorno, y no de sus características intrínsecas.
  • Los factores que alteran o perturban la tranquilidad (factores de perturbación), se organizan en las categorías de: 1) intrusión visual; 2) contaminación acústica y 3) frecuentación humana. Existe la posibilidad de añadir otros factores de perturbación sensorial como la contaminación lumínica del cielo nocturno o la intrusión odorífera.
  • La intensidad de perturbación de cada uno de los factores resulta de la combinación del efecto causado por todos los vectores que influyen sobre ellos. Un vector (vías de comunicación, núcleos urbanos,…) puede afectar más de un factor de perturbación.
  • La importancia relativa de cada vector no se define en base a las opiniones de la población, sino a características objetivas medibles.

Respecto a la metodología descrita en detalle por Jackson et al., Las principales diferencias se pueden sintetizar en dos aspectos fundamentales: a) no se considera factores favorecedores de la tranquilidad, en coherencia con la premisa de que todos los entornos no antropizados son igualmente tranquilos, y b) la importancia relativa de cada vector no se define en base a las opiniones de la población, sino a características objetivas medibles. Sobre la base de esta aproximación conceptual y de las premisas de partida que conlleva, se ha trabajado en los últimos años en la puesta a punto de las metodologías adecuadas para modelar los efectos de los diferentes vectores, y en el desarrollo y el ajuste de los algoritmos y expresiones matemáticas que permiten el cálculo y la rasterización en continuo de los impactos a escala territorial.

Esta idea y la metodología que la desarrolla se aplicaron de forma experimental en el marco del Plan especial de protección del medio natural y el paisaje de la Serra de Montsant (Mallarach et al., 2012MN Consultors, 2010). Así, el Montsant ha convertido en el primer espacio natural donde la tranquilidad se ha calificado como uno de los valores estratégicos a proteger y se ha cartografiado con un detalle inédito (celda de 25 m2). Posteriormente, en el marco de un convenio con la Universidad de Zaragoza, MN Consultores codirigió un trabajo donde se desarrolla una versión más evolucionada del método en el ámbito del Parque Natural del Garraf (Giménez, 2013), un espacio con fuertes contrastes en la percepción de la tranquilidad, circunstancia que exigía mejorar el modelo para ajustarlo a un rango más amplio y extremo de situaciones. En la actualidad se trabaja desde MN en la mejora de esta aproximación metodológica y en su aplicación a escala regional.

Referencias

Bell, S. (1999). Tranquility mapping as an aid to forest planning. Forestry Commission, Edinburgh (Scotland).

Fuller, D., Haggett, C. & Dunsford, H. (2008). Paisatge, Tranquil·litat i salut. En: Paisatge i Salut (Plecs de Paisatge. Reflexions ; 1), 311-334. Observatori del Paisatge de Catalunya (Olot) i Departament de Salut de la Generalitat de Catalunya (Barcelona).

Giménez, I. (2013). Estudio de la tranquilidad en el Parque Natural del Garraf. Dir. Pascual, R. y de la Riva, J. Máster en tecnologías de la información geográfica para la ordenación del territorio: sistemas de información geográfica y teledetección. Departamento de Geografía y Ordenación del Territorio (Universidad de Zaragoza).

Jackson, S., Fuller, D., Dunsford, H., Mowbray, R., Hext, S., MacFarlane R. & Haggett, C. (2008). Tranquillity Mapping: developing a robust methodology for planning support. Report to the Campaign to Protect Rural England, Centre for Environmental & Spatial Analysis, Northumbria University, Bluespace environments and the University of Newcastle upon Tyne.

Land Use Consultants (2007). Developing an intrusion map of England. Campaign to Protect Rural England, (CPRE), London.

MacFarlane, R., Hagget, C. & Fuller, D. (2005). Mapping Tranquility. Defining and assessing a valuable resource. Campaign to Protect Rural England (CPRE), London.

Mallarach, J.M, Comas, E., & de Armas, A. (2012). El patrimonio inmaterial: valores culturales y espirituales. Manual para su incorporación en las áreas protegidas. Manual 10; Serie de manuales EUROPARC-España. Ed. Fundación Fernando González Bernáldez. Madrid.

MN Consultors en Ciències de la Conservació (2010). Avaluació de la tranquil·litat a l'ENP Serra de Montsant. Pla especial de protecció del medi natural i el paisatge de la Serra de Montsant. Generalitat de Catalunya [en trámite].

Nogué, J., Puigbert, L. & Bretcha, eds. (2008). Paisatge i Salut (Plecs de Paisatge. Reflexions ; 1). Observatori del Paisatge de Catalunya (Olot) i Departament de Salut de la Generalitat de Catalunya (Barcelona).

Para citar esta referencia

Pascual Garsaball, R.; Giménez Anaya, I; Cadiach Ricomà, O.; García-Pérez, G.; Solé Herce, J. (2014). Desarrollo de una metodología para el análisis y la cartografía de la tranquilidad a escala territorial.

Obtenido de la página web de MN Consultors [28 Ene. 2015].

URL: http://www.mnconsultors.com/idi/desarrollo-de-una-metodologia-para-el-analisis-y-la-cartografia-de-la-tranquilidad-a-escala-territorial

Imágenes